Ambas recetas son indispensables dentro de la gastronomía colombiana puesto que son usadas y acompañan diversos platillos. El uso de la leche de coco es importantísimo en la cocina de las costas Atlántica y
Pacífica, así como en San Andrés y Providencia
y algunas regiones de la Amazonia.
Para preparar el arroz con coco primero deberá obtenerse la leche de coco.
Leche de coco:
1. Tomar un coco grande, quitar la estopa y extraer el agua. Partirlo y,
ayudándose con un cuchillo o espátula separar la pulpa de la concha y rallar a
mano. No se debe licuar el coco, pues nunca da la misma calidad de leche que con
la preparación clásica.
2. Una vez obtenido el afrecho o coco rallado, se puede utilizar la misma agua del
coco para extraer la primera leche (esto es solo aconsejable cuando se va a utilizar
la leche de inmediato en la preparación de algo que se va a consumir rápidamente,
pues tiene tendencia a fermentarse, lo cual daña los alimentos).
3. Se recomienda agregar al afrecho 2 tazas de agua tibia, revolver vigorosamente con
la mano, triturando el afrecho varias veces. Se van sacando puñados y se ponen en un colador, se presiona con la mano para extraerle toda la leche. Esta leche recibe por nombre primera o zumo. Poner 2 tazas más de agua tibia al mismo afrecho y repetir el procedimiento. Este resultado se conoce con el nombre de leche o agua-leche;
sucesivamente, se pueden sacar hasta 3 agua-leches.
Crema de coco
1. Para obtener la crema basta con dejar asentar la primera leche;
la crema flota en el líquido y se saca con una cuchara.
Es muy apreciada por sus usos en pastelería y guisos.
Aceite de coco
2. Para sacar el aceite, basta con poner el afrecho en una sartén con muy poca agua, y cuando
dé el primer hervor se baja y se deja reposar. El aceite flota en el líquido y se separa con ayuda de una cuchara.
Arroz con coco
1.Se pone el arroz a cocinar en la leche de coco con azúcar y sal, a fuego medio hasta
que se empiece a secar, posteriormente tapar y dejar a fuego muy lento para que termine
de secarse. Se usa para acompañar muchísimos platos.