Bëtscnáté o Carnaval del Perdón

Es un encuentro de fiesta y alegría entre los pueblos indígenas Inga y Kamëntsá. La fiesta debe ser realizada el lunes anterior al miércoles de ceniza, según la tradición. La vereda Sagrado Corazón, a las afueras del pueblo de Sibundoy, es el punto de encuentro para comenzar esta festividad.

Bétscnaté es la fiesta kamëntsá que marca el fin y principio del ciclo cósmico que renueva el orden y propicia el agradecimiento por lo obtenido y por el porvenir, en este espacio existe el momento de armonizar, agradecer y conectar desde la visión de que somos parte de un todo mayor.

El Bëtscnáté o Carnaval del Perdón se festeja en el Valle del Sibundoy, departamento del Putumayo. Es un encuentro de fiesta y alegría entre los pueblos indígenas Inga y Kamëntsá. La fiesta debe ser realizada el lunes anterior al miércoles de ceniza, según la tradición. La vereda Sagrado Corazón, a las afueras del pueblo de Sibundoy, es el punto de encuentro para comenzar esta festividad.

Bëtsknaté está compuesta por Bëts,adjetivo que se refiere a grande o gran), Kna, sufijoque significa “como”, y Té, sufijo que significa“día”): Bëtsknaté, que se traduce como el Día Grande, el más importante para los Kamëntŝá, porque es una festividad de renovación cíclica-temporal que tiene como finalidad ante todo agradecer a la Madre Tierra por los frutos recibidos y asegurar espiritualmente la prosperidad del ciclo que se renueva.

El Bëtscnaté como ritual de conectividad y armonización

La diferencia de esta fiesta con otras presentes en nuestro territorio es que Bétscnaté tiene explícitamente el carácter de ritual armonizador de conflictos internos y externos, tanto del Valle del Sibundoy como la región y sus habitantes. Esta particularidad tiene diversos orígenes y muchos académicos han formulado teorías e investigaciones sobre esta fiesta-ritual.

Al fin y al cabo, Bétscnaté es la fiesta kamëntsá que marca el fin y principio del ciclo cósmico que renueva el orden y propicia el agradecimiento por lo obtenido y por el porvenir, en este espacio existe el momento de armonizar, agradecer y conectar desde la visión de que somos parte de un todo mayor.

 

“La finalidad es que para estar en este evento tan espiritual hay necesidad de tener el cuerpo limpio, tener esa facilidad de conectividad en sí, tanto con las personas que están allí como con todas las demás. Entonces en el ritual lo hacen con esa intención para que la actividad o el ritual salgan de lo mejor y sea provechoso para cada persona, y uno sea moderado en la misma participación. Cuando se ha terminado eso viene la otra parte en donde viene el ritual diciendo que si algo malo pasó en la fiesta pues se pueda sacar. Después hay que buscar cómo deshacerme de las malas cosas, malas intenciones que pudo haber colocado alguien durante la fiesta y que después me puede afectar a mí.”

(Taita Santos, Sibundoy, entrevista personal, febrero 7 de 2016)

Finalmente podemos concluir que el Bëtscnaté o día grande Kamëntsá, es una celebración que sintetiza la identidad Kamëntsá en todos sus aspectos, es un día de reconciliación, limpieza y reencuentro con las familias. La ratificación del respeto por nuestros mayores en el acto simbólico y ritual de compartir de bebida y alimentos con todos los congéneres.

Esta es una manifestación que está declarada como Patrimonio de la Nación en Colombia.